Tras la aprobación de la octava fase del proyecto, FAMSI extiende su apoyo a este programa impulsado por las Diputaciones de Sevilla y Huelva desde el año 2006 en el marco de la campaña “Andalucía Solidaria con África”, que le convierte en la acción más relevante que la entidad ha llevado a cabo en el continente africano dentro del sector del Desarrollo Rural Integral sostenible con el refuerzo de capacidades orientado a la seguridad alimentaria a través especialmente de la Escuela de Capacitación agropecuaria de Mlale, que inicio su pleno funcionamiento el pasado 6 de enero de 2014.

 

El pasado 27 de agosto, se mantuvo una reunión de seguimiento técnico, con participación de las entidades financiadoras y técnicos del programa para establecer los pasos a seguir en los próximos meses, que pasan por establecer las condiciones que permitirán que el proyecto sea asumido progresivamente por las entidades contrapartes, especialmente el Arzobispado de Lilongwe, con el fin de realizar un traspaso progresivo, siempre acompañado desde FAMSI a través de una supervisión técnica sobre el terreno y un apoyo financiero de las dos diputaciones implicadas.

César Mora, coordinador del FAMSI en Malawi, ha destacado que el “proyecto continúa avanzando con la incorporación de alumnos a los diferentes módulos de formación”. El perfil medio del alumnado es “masculino y tiene como base la enseñanza primaria”,según apunta Mora, teniendo como áreas temáticas principales, diferentes capacitaciones técnicas que van desde la biología de las plantas, manejo de suelos y de recursos hídricos, a la agricultura orgánica y manejos agroforestales.

Este progresivo traspaso a las contrapartes locales, permitirá una mayor apropiación y gestión local de un recurso de gran importancia para el conjunto del país como es la Escuela Agropecuaria, que pretende, mediante la formación y la capacitación de la población de la zona, dar una posibilidad de progreso para los más jóvenes mediante el desarrollo de una economía agropecuaria local. De igual forma, la adecuación de terrenos de cultivo y las obras hidráulicas realizadas en los años precedentes, posibilitará mantener cultivos y disponer de recursos en tiempos de sequía.

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